miércoles, 16 de enero de 2008

[*(Noticia 16/01/08)*]

Descubiertas las pautas eléctricas cerebrales que producen el lenguaje.
El lenguaje es una función cerebral altamente compleja que emerge de la interacción entre el desarrollo biológico del cerebro y el medio social. Un estudio reciente, que ha combinado la electroencefalografía y las imágenes de resonancia magnética funcional, ha puesto de relieve las diferencias entre las oscilaciones de la actividad eléctrica neuronal de los dos hemisferios cerebrales, que son las que posibilitan que hablemos y comprendamos el lenguaje. Asimismo, ha descubierto una concordancia entre dichas oscilaciones y las que se suceden en la corteza motora, lo que confirma la enorme complejidad del fenómeno lingüístico. La comprensión de la importancia de la actividad eléctrica del cerebro en el lenguaje podría ayudar a sanar enfermedades como la dislexia o el autismo infantil.
Un equipo de científicos del Instituto Nacional de la Salud y de la Investigación Médica de Francia (el INSERM) ha conseguido avanzar en la comprensión de los mecanismos cerebrales que nos permiten articular y comprender el lenguaje, gracias a la combinación de dos técnicas de análisis del cerebro: los electroencefalogramas (registros gráficos de la actividad eléctrica del cerebro) y la resonancia magnética funcional, que permite la detección e identificación de áreas del cerebro en activo.
Según explica el INSERM en un comunicado, el registro simultáneo llevado a cabo con ambas tecnologías ha permitido a los investigadores sugerir las bases fisiológicas que explicarían la especialización del cerebro en la decodificación y producción de palabras, aportando asimismo nuevas pistas para entender las principales patologías de la comunicación humana, como el autismo infantil o la dislexia.
Esta investigación ha reunido, además de a científicos de la unidad del Inserm «Action, Neuroimagerie, Modélisation», de la Escuela Normal Superior de París, a investigadores daneses y alemanes. Sus resultados han aparecido publicados en la revista Neuron.

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